Surcar las olas en un velero te brinda una comprensión profunda de la belleza y magnitud del océano. Las olas en esta travesía son muy largas y se deslizan lentamente debajo de la quilla del barco. Al relajarte en el lento oleaje del océano Atlántico, encontrarás una fauna marina más sorprendente: aves marinas oceánicas que nos acompañarán en todo momento, bancos de peces voladores, túnidos pescando cardúmenes de peces y cetáceos de todo tipo.
Madeira es sobrecogedora. Geológicamente se trata de un archipiélago espectacular, con islas rebosantes de colores exóticos y siempre cálidas bajo el sol. Perla del Atlántico, isla de la primavera eterna… Madeira bien merece los imaginativos sobrenombres que se le dan.
Desde este conjunto de islas portuguesas, realizaremos una navegación hasta las Islas Azores, otra de las joyas que nos deja el ancho océano Atlántico.
Esta es la segunda etapa de un viaje más largo que se compone de 4 etapas en total, a lo largo de las cuales exploraremos verdaderos paraísos náuticos.
Puedes consultar todas las etapas aquí en Sailwiz y apuntarte a una o varias:
- Etapa 1: de Baiona a Madeira.
- Etapa 3: por las Azores.
- Etapa 4: Azores a Baiona
La travesía se realiza a bordo de un Ketch de acero de 22 metros amplio, seguro, sólido y fácil de navegar. A bordo hay espacio para 10 pasajeros, pudiendo pasar la noche en cómodos camarotes. Debajo de la cubierta también hay una amplia zona de día, donde se sirven las comidas. La timonera cuenta con cómodos sofás con vistas panorámicas.
La tripulación se compone de un capitán experimentado y un primer oficial bilingües (inglés y castellano al menos), de forma que siempre haya un responsable de guardia.
A bordo enseñaremos (a todos los que os animéis) el oficio del navegante, con la posibilidad de certificar vuestros conocimientos con los títulos RYA Competent Crew. Asimismo, habrá posibilidad de hacer las millas necesarias para las titulaciones Yacht Master Offshore, Yacht Master Ocean y PPER.
Este es un viaje para viajeros activos, navegamos juntos en este barco. No se requiere experiencia en navegación, aunque sí una actitud activa y abierta. Te enseñamos todo lo que necesitas saber a lo largo del camino, desde navegar hasta dirigir el barco, y desembarcas como un viejo lobo de mar.
Naturalmente, también habrá mucho tiempo para relajarse, leer un libro y mantener conversaciones estimulantes con los compañeros de viaje. Navegamos hacia la noche y a todos a bordo se os asignan guardias. De esta manera, podremos seguir navegando y todos a bordo del barco tendremos tiempo suficiente para descansar, comer y dormir además de navegar.. Sin embargo, las noches en el mar son mágicas. Debido a la completa falta de contaminación lumínica, no sólo estás contemplando las estrellas: puedes ver toda la Vía Láctea dispuesta ante ti.
Llegar a puerto después de un largo viaje por mar es una experiencia inigualable. ¡Intenta caminar recto con esas piernas de mar recién adquiridas!
